¿Quieres viajar con nosotros de la Feria de Córdoba a Japón, y de Japón a Inglaterra? Con las vajillas de Torres Ferreras x Sebastián Gallego tienes un billete de ida directo a estos maravillosos lugares llenos de alegría, calma, flores, y mucha tradición de diseño cerámico.
El comunicador cordobés Sebastián Gallego se ha unido a Torres Ferreras para crear tres bonitas vajillas de coleccionista, perfectas para regalo, para vestir tu mejor mesa de gala, o para celebrar día a día la belleza del objeto cotidiano.
La unión hace la fuerza.
Sebastián Gallego es un comunicador cordobés con dos grandes pasiones: hablar y las vajillas. La primera afición queda más que demostrada en sus colaboraciones en TV y su exitoso podcast “La Vida y Tal”. La segunda, la enseña en sus redes sociales desde sus comienzos y, además de nuestro origen cordobés, es nuestro punto en común principal. Por eso, con estos dos lazos de unión, teníamos que colaborar en algo especial.
Tras años de ser conocidos, a principios de este año supimos que Sebastián se había comprado una casa en Madrid. Torres Ferreras tenía que estar en esa casa, que seguro que era un alarde de buen gusto por la decoración y el diseño de interiores. Así que le ofrecimos una de nuestras vajillas como regalo. Pero Sebastián, mente inquieta y alma emprendedora como es, dijo: «¿Y si diseñamos una vajilla entre los dos?»
Pura inspiración
Con esa ilusionante pregunta comenzamos a principios de verano nuestro periplo en el diseño colaborativo. Por un lado, Torres Ferreras: sobriedad, utilitarismo, contemporaneidad, minimalismo incluso, o más bien, humildad. Por otro, Sebastián Gallego: más es más. Los puntos en común: la elegancia, el gusto por lo bello, el amor por la artesanía, la de verdad. Y a partir de ahí, muchos mensajes con referencias, ideas e imágenes.
Encontramos tres fuentes de inspiración principales: la cerámica popular andaluza – de La Rambla, por supuesto, pero también la de los lebrillos granadinos o la de las cenefas de Triana-, las porcelanas Imari de Japón, y la llamada china o porcelana inglesa, con ese aire vintage y romántico de estampados pastel de rosas y otras flores. Entonces, surge la segunda idea: «¿Y si hacemos tres vajillas en lugar de una, que sean distintas pero combinables entre sí?«
Varios libros de flores, un amplio estudio de decoraciones tradicionales de todo el mundo, algunas visitas al Museo de la Cerámica de La Rambla e incluso un viaje a Japón después, toman forma los primeros bocetos y se enciende la bombilla de la decisión: cada vajilla tendrá como elemento principal alguna flor oriunda de las tres zonas usadas de inspiración.
Tres vajillas exclusivas, tres matas de flores de una misma raíz.
Los diseños definitivos son el resultado, pormenorizado, cuidado y estudiado, de un apretón de manos y mentes entre Sebastián Gallego y nuestro creativo Luis Torres:
El primero, una vajilla con un diseño enraizado en la cerámica tradicional andaluza y con patrones florales propios de las fiestas y las calles de los pueblos del sur de España en general, y de los maravillosos patios cordobeses en particular.
El segundo, una segunda vajilla de inspiración japonesa, que puede recordar a esos patrones azul cobalto y rojo de la porcelana Imari, pero siempre con una interpretación y una pincelada muy propia de La Rambla, la «ciudad alfarera» originaria de la cerámica de Torres Ferreras.
Y por último, una tercera vajilla con motivos florales más delicados, románticos, que recuerdan a los jardines ingleses y las vajillas que se usan para la hora del té británica.
No en vano, los nombres de las vajillas tampoco surgen al azar. Feria, Pagoda y Cottage son tres lugares que representan tres culturas: la andaluza de Sebastián y Torres Ferreras; la japonesa, que a través de la cerámica y la artesanía marca un claro paralelismo con La Rambla y con España; y la inglesa o europea más del norte, que venera, igual que en Andalucía, a la campiña y sus grandes casas, abadías y cortijos. Las tres vajillas y los tres nombres muestran algo que consideramos importantísimo para nuestro desarrollo y el de la artesanía: el mundo rural. Y por supuesto, las tres culturas tienen un amor especial por la belleza.
Finalmente, el largo trabajo físico y mental de bocetos y pruebas, cocinado a fuego lento, como se hace en los verdaderos oficios, se ha hecho realidad en esta combinación de platos llanos, hondos y de postre que conversan entre ellos aunando artesanía y vanguardia, diseño y sostenibilidad, decoración de interiores y gastronomía, historia y amor. Y para completar la mesa, tres ensaladeras y tres fuentes ovaladas que visten cualquier aperitivo, ensalada o canapé.
Maestría artesanal y calidad utilitaria.
Para ir acabando de contar este precioso proyecto, tenemos que agradecer a Sebastián Gallego que haya confiado en nuestro taller, permitiéndonos divulgar el necesario mensaje de que la artesanía de verdad es más contemporánea que nunca.
Y es que la principal característica de estas vajillas es la calidad, ya que están hechas en un gres de gran dureza, que cuece a 1200ºC aprox. y que son aptas para horno, lavavajillas y microondas. Este material, a diferencia del barro tradicional, vitrifica y cierra el poro, por lo tanto, no se desconcha, ni se filtra ni craquela; y tiene 0% de contenido en plomo, lo que lo hace perfectamente adecuado para el uso alimentario. Así, las vajillas Torres Ferreras x Sebastián Gallego cumplen con la máxima del Arts & Crafts y el Mingei: la artesanía debe ser para usarla y la belleza debe estar en el objeto cotidiano.
Como siempre en nuestro taller de alfarería, los platos están hechos uno a uno en el torno por el maestro alfarero, y todo el proceso que siguen hasta ser decorados -oreo, retorneado, secado, cocción en bizcocho, esmaltado, impresión artesanal del sello, etc.- es totalmente artesanal, lento y cuidado:
La decoración también es totalmente manual, a pincel, con la técnica tradicional de la sobre cubierta o sobre baño, con óxidos metálicos como el cobre o el cobalto y otros pigmentos sobre un esmalte blanco. Aunque con elementos y patrones de distinta inspiración, todos los platos tienen el toque de la pincelada rápida característica de las expertas y talentosas pintoras de La Rambla, como se conoce el colectivo de decoradoras de cerámica rambleña, principalmente mujeres, que también forman Torres Ferreras y su historia.
Esto así, es obvio pero no está más decir que todas las piezas tienen variaciones de color y tamaño, imperfecciones y matices propios de la artesanía que hacen único, no ya cada vajilla, sino cada plato dentro de un mismo set.
En definitiva, estas vajillas son un must de los aficionados a la cocina, a las mesas, a la cerámica o los coleccionistas de platos y menaje, y un perfecto regalo de Navidad, de cumpleaños o de boda que, además de bonito y original, colabora en el mantenimiento de un sistema productivo más local, más sostenible, más justo y made in Spain.
¡Esperamos que os encanten tanto como a nosotros!